
En apoyo de la Declaración de Londres de ISO sobre el Cambio Climático en 2021, se aprobó una resolución que dará lugar a incorporar dos nuevas disposiciones en el texto de varias normas de sistemas de gestión existentes, y que se incluirán en todos los nuevos documentos normativos que se están elaborando/actualizando, para abordar la necesidad de considerar el efecto del cambio climático en la capacidad de lograr los resultados previstos del sistema de gestión. Los cambios se introducirán inicialmente como enmiendas a normas ya publicadas.
En el mes de febrero se aprobó un comunicado relativo a modificar la estructura armonizada que deben utilizar todas las normas de sistemas de gestión de ISO (antes denominada Estructura de Alto Nivel, HLS), para incluir una reseña explícita a la consideración de los aspectos climáticos las cuales se incluirán estas consideraciones en la revisión y publicación de nuevas normas.
A partir de su publicación, el 23 de febrero del 2024, esta enmienda pasa a ser de aplicación inmediata para aquellas organizaciones que tengan implantado y certificado un sistema de gestión, así como para los organismos de certificación y de acreditación.
Objetivo principal: Asegurar que el cambio climático sea un tema central en la gestión empresarial, fomentando prácticas más sostenibles y resilientes.
Estos son los cambios que se incorporarán al nuevo texto de la Estructura Armonizada de la siguiente manera en la Guía para Auditar: LAS CUESTIONES DEL CAMBIO CLIMÁTICO:
4.1 Comprensión de la organización y su contexto
La organización debe determinar las cuestiones externas e internas que sean relevantes para su propósito y que afecten a su capacidad para lograr los resultados previstos de su sistema de gestión
Añadido: La organización debe determinar si el cambio climático es una cuestión pertinente.
4.2 Comprender las necesidades y las expectativas de las partes interesadas

Esta nueva exigencia busca asegurar que el cambio climático sea un factor clave en la toma de decisiones de las empresas, independientemente del tipo de sistema de gestión que implementen (calidad, seguridad, salud, etc.).
¿Qué implica esto?
Análisis contextual ampliado: Las organizaciones deberán evaluar cómo el cambio climático afecta sus operaciones y cómo sus actividades contribuyen a este fenómeno.
Integración en todos los sistemas: El cambio climático debe ser considerado en todas las fases de los sistemas de gestión, desde la planificación hasta la mejora continua.
Enfoque proporcional: La consideración del cambio climático debe ser proporcional al contexto de cada organización y al tipo de sistema de gestión.
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